El objetivo de este proyecto es estudiar los yacimientos arqueológicos de la Reserva de la Biosfera Maya de Guatemala, especialmente los situados en sus límites sudorientales, junto al lago Yaxhá. Se han marcado en el mapa dos zonas de estudio para dar una idea de su ubicación dentro del Petén (Fig.2).
Pie de Image: Mapa de Mesoamérica con un búfer de 20km alrededor del Lago Yaxhá, ampliando algunos de los yacimientos Maya ubicados en la zona, clasificados según su accesibilidad por carretera. El mapa también muestra las dos áreas de estudio.
Créditos: Cristina Gonzalez-Esteban, usando el programa QGIS
Algunas de estas zonas crecieron en población durante el Preclásico Medio maya (1000-350 a.C.) -principalmente Yaxhá y Holtun- pero no sería hasta el Clásico Temprano (250-600
d.C.) cuando las Tierras Bajas Orientales del Petén experimentan su mayor poder alcanzando Yaxhá el tamaño de la tercera ciudad más grande de la época. Los sitios aledaños también tuvieron el mayor florecimiento durante el Período Clásico Medio o Tardío (c.600-900 d.C.) como La Blanca o San Clemente (c. 250-950 d.C.) (Mendoza 2001).
Sin embargo, una vez que llega el Clásico Terminal e inicios del Postclásico, las actividades en estas áreas decaen claramente hasta el punto de abandono de la población regular alrededor de 900-950 DC, periodo de tiempo asociado con el Colapso Clásico Maya (Hermes et al. 1999). La eventual presencia de ocupación aún puede verse durante el Postclásico en sitios como Yaxhá o La Blanca, este último albergando un gran número de refugiados de los asentamientos menores alrededor de la ciudad justo después del Colapso Maya y hasta alrededor del siglo XI DC (Vidal-Lorenzo y Muñoz-Cosme 2007).
Posteriormente, no hubo un uso continuado de estas tierras hasta que fueron "re-encontradas" por anticuarios europeos a finales del siglo XIX o principios del XX. Esta inactividad ha hecho que los restos supervivientes sólo estén cubiertos por la vegetación, no por nuevas construcciones. Esto beneficia enormemente al proyecto propuesto, ya que la tecnología que utilizaremos (LiDAR y fotogrametría) crea una copia idéntica del mundo real en formato digital (gemelo digital). Por lo tanto, esta zona y estos sitios son los lugares ideales para desarrollar este proyecto, comparar las diferentes tecnologías y aprender sobre el impacto que pueden tener cuando se utilizan de manera rentable. Además, este estado "aislado" de los yacimientos evolucionará desde un punto de vista único de las comunidades locales respecto a estas zonas "abandonadas" o desocupadas y a cómo los investigadores extranjeros interpretan y analizan los restos y cómo ello repercute o no en las actividades cotidianas y la ideología de sus gentes.